El alojamiento muy bien cuidado y superlimpio, íbamos con peques y el lugar es ideal, mucho espacio para ellos (dentro y fuera de casa) lugares para jugar y mientras te relajas en las tumbonas, tenían hasta vajilla de plástico para ellos y nos facilitaron una trona. Raquel súper amable, no pusieron pegas para el check in y nos esperaron en el pueblo para indicarnos. La única pega es que sólo estuvimos 2 noches... seguro que repetiremos. Muchas gracias por las indicaciones de donde comer!!! Aunque teníamos de todo en la cocina. lo recomiendo 100%, seguro que repetimos.